El elenco de Nicolás Córdova se llevó la victoria en los descuentos gracias a Ian Garguez.
La selección chilena vivió un debut lleno de dramatismo en el Estadio Nacional y recién en la agonía pudo vencer con un 2-1 Nueva Zelanda para sumar sus primeros tres puntos en el Grupo A.
En un compromiso que se vislumbraba como una verdadera prueba de fuego para cimentar sus aspiraciones en el certamen, el once dirigido por Nicolás Córdova saltó al terreno de juego con una inspiración notable.
La ofensiva chilena no tardó en mostrar sus cartas. Entre los más incisivos, Lautaro Millán (8'), con un remate que se fue cerca de la portería, y Agustín Arce (10'), quien probó suerte, fueron los encargados de inquietar tempranamente la portería custodiada con solvencia por Henry Gray.
Paulatinamente, las acciones se dividieron, y el conjunto oceánico, apoyado en su evidente poderío físico, respondió con ímpetu. Finn McKenlay (20') y Fergus Gillion (33') probaron los reflejos del meta Sebastián Mella.
El combinado nacional no se marchó al descanso con las mejores sensaciones y, al reanudar la segunda mitad (49'), tampoco logró inyectar el dinamismo esperado.
Siguieron las zozobras y un notable Mella (49') evitó la primera conquista neozelandesa. Sin embargo, el fútbol, caprichoso por naturaleza, le tendió una mano a Chile con un error del rival fue capitalizado por Millán (53').
La Roja intentó asentarse en su campo, pero los neozelandeses, lejos de ceder, mantuvieron un asedio constante. La tensión alcanzó su punto álgido cuando el juez Irfan Peljto sancionó un penal (80'), una decisión que mantuvo incluso después de la "tarjeta verde" para la revisión.
Aquella determinación permitió a Nathan Walker igualar las cifras desde los doce pasos (85'), un golpe que pareció definitivo y devastador para las aspiraciones chilenas.
Cuando la noche parecía sellarse con un amargo empate, y el reloj se consumía en los ocho minutos adicionales decretados por el árbitro, llegó el premio a la perseverancia. En el último suspiro, Ian Garguez (90+6') cazó un rebote y conectó el agónico 2-1.
El zaguero central estalló en un festejo cargado de euforia, incluso recibiendo una amarilla por quitarse la camiseta, y el pitazo final decretó una noche memorable en este vibrante inicio del Mundial sub 20.
Este dramático resultado catapulta a Chile a la cima del Grupo A con 3 puntos, compartiendo el liderato con Japón, su próximo desafío el martes 30 de septiembre. El elenco nipón llega con el ánimo en alto tras vencer 2-0 a Egipto, el colista de la zona.
CHILE (2): Sebastián Mella, Felipe Faúndez, Ian Garguez, Matías Pérez, Nicolás Suárez, Mario Sandoval (Willy Chatillez, 90+2'), Agustín Arce, Lautaro Millán (Joaquín Silva, 71'), Vicente Álvarez (Francisco Marchant, 52'), Juan Francisco Rossel [C], Emiliano Ramos (Rodrigo Godoy, 71').
NUEVA ZELANDA (1): Henry Gray, Xuan Loke, James Bulkeley, Lukas Kelly-Heald [C], Codey Phoenix, Luke Brooke-Smith (Nathan Walker, 79'), Finn McKenley, Fergus Gillion, Troy Putt (Gabriel Sloane-Rodrigues, 88'), Keegan Kelly, Stipe Ukich (Jayden Smith, 90+3').
GOLES: 1-0: 53' Lautaro Millán (CHI); 1-1: 85' Nathan Walker, de penal (NZL); 2-0: 90'+7' Ian Garguez (CHI).
TARJETAS AMARILLAS: 19' Nicolás Suárez (CHI), 90'+8' Ian Garguez (CHI), 9' Luke Brooke Smith (NZL), 16' Xuan Loke (NZL), 90'+2' Keegan Kelly (NZL), 90'+4' Nathan Walker (NZL).
TARJETAS ROJAS: No hubo.
ÁRBITRO: Irfan Pejto (GA).
ESTADIO: Estadio Nacional, Santiago.
