El Gobierno de Javier Milei confirmó este jueves que los jubilados no tendrán un aumento extraordinario en sus pensiones, ni se actualizarán montos por bonificaciones, que fueron reclamados en la movilización del miércoles pasado frente al Congreso.
"No hay nada evaluado respecto a un aumento en las jubilaciones o en el bono", dijo el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su habitual conferencia de prensa desde Casa Rosada, sede del Poder Ejecutivo.
Adorni indicó que para brindar un nuevo aumento en los haberes debería existir "una partida que pueda sostener ese incremento sin que rompa el equilibrio fiscal".
El bono adicional a liquidarse en marzo de 2025 continuará siendo de 70.000 pesos (alrededor de 60 mil pesos chilenos) y estará destinado para quienes cobren la jubilación mínima, que en este mes alcanza los 279.121 pesos (240.420 en moneda chilena).
"De un lado tenés a un pasivo que recibe su jubilación y del otro lado hay una persona activa que sostiene parte de ese haber. Para eso tiene que haber mayor empleo, mayores salarios y para eso debe haber mayor inversión, que se logra con reglas del juego más claras y una economía ordenada", justificó el portavoz.
El 63,5% de los jubilados argentinos cobran una pensión mínima, ingreso que llega a los 349.121 pesos (300.715 pesos chilenos) por el bono de refuerzo que la seguridad social otorga desde septiembre de 2022 ante la situación de emergencia económica de Argentina.
Según datos oficiales, el último aumento a las jubilaciones, sin bonos, fue del 2,2% este mes y no supera los 269 dólares (249.074 en moneda chilena), mientras que una persona con vivienda propia necesita un ingreso no menor a 325 dólares (300.925 pesos chilenos) para sobrevivir.
De acuerdo con cálculos privados, ese ingreso mínimo debe ser de al menos el triple en los adultos mayores, cuyos gastos en salud y cuidados son superiores a los de otros grupos etarios.