Se trata de la primera llamada directa entre Trump y Xi desde que el estadounidense dejó la Casa Blanca en 2021.
Según registros del Departamento de Estado que datan de 1874, ningún jefe de Estado chino ha asistido anteriormente a la investidura de un presidente estadounidense.
El presidente electo de EE.UU., Donald Trump, informó este viernes por la mañana que había mantenido una conversación telefónica con el mandatario chino, Xi Jinping.
Ambos líderes acordaron trabajar juntos para hacer del mundo "un lugar más pacífico y seguro" cuando Trump asuma su mandato el próximo lunes.
El equipo de seguridad nacional de Trump ya había establecido contacto con Pekín en semanas recientes, pero esta conversación marca un hito en las relaciones entre ambas potencias tras cuatro años de distanciamiento.
La llamada tuvo lugar apenas horas después de que la Cancillería china confirmara que el vicepresidente chino, Han Zheng, asistirá como enviado especial a la ceremonia de toma de posesión de Trump, en lugar del presidente Xi.
Trump destacó en su red social Truth Social que durante la conversación se trataron temas clave como el comercio, el fentanilo, TikTok y otras cuestiones importantes para ambas naciones. "La llamada ha sido muy buena tanto para China como para EE.UU. Espero que resolvamos muchos problemas juntos", expresó el mandatario electo
Entre los temas tratados, destacó la aplicación TikTok, que enfrenta la posibilidad de ser prohibida en EE.UU. a partir del domingo.
Una ley estadounidense podría impedir a las tiendas de aplicaciones ofrecerla debido a preocupaciones sobre el manejo de datos por parte de la empresa china ByteDance.
La plataforma, utilizada por más de 170 millones de estadounidenses, dejaría de funcionar si su propietario no se deshace de ella.
Esta misma mañana, el Tribunal Supremo de EE.UU. respaldó la implementación de dicha ley, considerando que permitir el funcionamiento de TikTok podría facilitar una intromisión del Gobierno chino.
Sin embargo, Trump ha expresado su apoyo a la plataforma, lo que plantea interrogantes sobre si su Administración procesará o no a las empresas que incumplan la normativa.
Además, Trump ha reiterado su compromiso de imponer nuevos aranceles a las importaciones chinas, una medida similar a las que impulsó durante su primer mandato (2017-2021) en el marco de la guerra comercial con Pekín.
Este enfoque se suma a las tensiones bilaterales sobre temas como Taiwán, la tecnología y la guerra de Ucrania.
Cabe destacar que, tras la reelección de Trump en noviembre, Xi Jinping le envió un mensaje de felicitación, señalando que "EE.UU. y China ganan con la cooperación y pierden con la confrontación", expresando su esperanza de que ambas naciones puedan encontrar una forma de "llevarse bien".
