El Gobierno de Gaza, controlado por el grupo islámico palestino Hamás, consideró "vergonzoso" el video compartido por Donald Trump sobre lo que sería una futura Franja reconstruida y convertida en destino turístico.
La Oficina de Medios del Gobierno de Gaza afirmó que el video, generado con inteligencia artificial, refleja una "mentalidad colonial y racista", según un comunicado difundido por la agencia palestina Sanad.
El registro, que dura unos 30 segundos y fue compartido por Trump en sus cuentas de Truth Social e Instagram, parte de la situación actual de Gaza, totalmente destruida y con ciudadanos adultos y menores deambulando entre cascotes por sus calles bombardeadas.
A continuación, avanza hacia lo que podría ser el futuro de la Franja, con imágenes de lo que parece un balneario marítimo lleno de rascacielos, hoteles y mercados para turistas.
El director general de la Oficina de Medios de Gaza, Ismail al Thawabta, dijo que el video distorsiona la realidad y justifica los "crímenes israelíes", al mostrar Gaza como una "tierra sin pueblo", en un intento de legitimar una limpieza étnica.
Al Tawabta subrayó que Gaza continuará siendo parte integral de Palestina, e instó a la comunidad internacional a intervenir para poner fin al apoyo de Estados Unidos a la ocupación israelí y a los crímenes contra los palestinos.
El video también muestra imágenes de Elon Musk, actual asesor de Trump, disfrutando en la playa de la ciudad, de la comida local y lanzando billetes al aire, mientras bailarinas, con barba, interpretan la danza del vientre.
La grabación también mezcla imágenes del propio Trump generadas por IA, primero en una discoteca y, posteriormente, en la piscina de un hotel junto al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu; ambos en traje de baño.
También se incluye un edificio convertido en un hotel de la cadena Trump, y una gigantesca estatua dorada del propio presidente de Estados Unidos en una de las nuevas y flamantes calles de la ciudad.
Estas imágenes se han hecho públicas semanas después de que el presidente de Estados Unidos anunciara de forma inesperada, durante un encuentro con Netanyahu en Washington, que "tomaría el control de Gaza" y expulsaría a los más de dos millones de habitantes de la Franja a Egipto y Jordania.
Trump dijo entonces que pretendía convertir el enclave en una especie de "Riviera de Medio Oriente", aunque no dio detalles de cómo pensaba llevar a cabo estos planes, duramente criticados por la comunidad internacional.
