El templo católico de Vicuña Mackenna y Barón Pierre De Coubertin fue atacada en 2019 y luego quemado en 2020.
Con una misa el domingo 25 de mayo, presidida por el cardenal Fernando Chomali, la Iglesia La Asunción volverá a abrir sus puertas, luego de ser vandalizada en 2019 y luego incendiada en 2020, en medio de protestas en el sector de Plaza Baquedano, durante el llamado estallido social.
"Lo que quedó en pie tras los hechos vandálicos fue solo un esqueleto de muros vacíos, pero la fe de sus fieles permaneció firme y hoy agradece a la comunidad los esfuerzos en pro de su reconstrucción", comentó la sección chilena de la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN, en inglés).
Esta institución gestionó donaciones y ayudó a financiar las obras de reconstrucción en el edificio de Vicuña Mackenna 69, que permitirán ahora "que la iglesia vuelva a ocuparse, con el reforzamiento de muros, la instalación de una nueva techumbre, puertas y ventanas, además de la reparación del sistema eléctrico e iluminación, y pintura".
"También se han rehabilitado nuevos espacios para la comunidad, incluyendo salas para actividades, oficinas y un jardín destinado al encuentro", dijo el grupo.
En octubre de 2024, un fallo de primera instancia condendó al Estado de Chile a pagar una indemnización de cerca de 2.900 millones de pesos por la destrucción de la iglesia, pues pese a que se reconoce que la policía tomó medidas de seguridad en medio de las protestas, éstas no fueron suficientes para proteger el recinto.
ACN Chile destacó que "uno de los momentos más simbólicos de los trabajos en el templo fue el hallazgo de los restos de la campana de la torre, que resistió el fuego y la caída. En uno de los fragmentos se descubrió la palabra 'Esperanza', un mensaje que refleja el espíritu con el que se han llevado a cabo las obras".
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