Comienza la demolición de la toma de Quilpué

Publicado:
| Periodista Radio: Belén Velásquez
| Periodista Digital: Cooperativa.cl

El proceso se desarrolla con un fuerte despliegue policial.

Las autoridades están habilitando albergues para los ocupantes.

Comienza la demolición de la toma de Quilpué
 Belén Velásquez
Llévatelo:

Esta mañana las autoridades iniciaron formalmente el proceso de desalojo y posterior demolición de las viviendas en la Toma Calicheros en Quilpué (Región de Valparaíso), que se levantó ilegalmente en terrenos pertenecientes al empresario Alejandro Correa.

Correa fue asesinado por un sicario en 2020 mientras realizaba gestiones para recuperar precisamente estas propiedades.

El operativo comenzó con un fuerte despliegue policial y municipal, aunque la maquinaria pesada aún estaba pendiente de llegar para concretar la demolición de las 120 estructuras afectadas por la orden judicial.

El ambiente en el lugar se ha mantenido tranquilo durante las primeras horas de la mañana, caracterizado por una baja presencia de ocupantes y un fuerte contingente de Carabineros, incluyendo personal de Control de Orden Público (COP).

Los residentes que quedaban continuaban desarmando sus viviendas y sacando enseres en vehículos particulares, una dinámica de salida voluntaria que se había intensificado en los días previos.

Según las estimaciones de las autoridades, el proceso avanzó gracias a que cerca del 30% de las aproximadamente 40 familias catastradas ya había abandonado el terreno por su propia voluntad, aceptando la inminencia del desalojo tras el largo proceso judicial.

Desalojo sin incidentes

El delegado presidencial de la provincia de Marga Marga, Fidel Cueto, confirmó que se han estado entregando apoyos sociales y se realizó un catastro para identificar la situación de personas vulnerables y migrantes.

De acuerdo con dicho registro, cerca de 80 personas se han retirado del sector en esta jornada. Además, las autoridades estiman que, por lo menos, el 50% de las viviendas ya fueron desarmadas por los mismos ocupantes.

"Hasta el momento, no hemos tenido ninguna situación violenta ni agresiva por parte de las personas que están acá, sino que más bien están consultando cómo va a ser el retiro de las últimas cosas que les quedan", complementó la capitán Javiera García, de Comunicaciones Sociales de Carabineros, antes de apuntar que alrededor de 50 personas siguen en terreno.

"Estamos trabajando por fases, y el ingreso de las maquinarias también será por fases. Hay perímetros de seguridad, hay agentes de diálogo que están en distintos lugares, especialmente donde aún no se retiran las familias", añadió la uniformada.

El delegado presidencial regional, Yanino Riquelme, aseveró que "afortunadamente, ha sido un proceso tranquilo, en calma, sin necesidad de uso de violencia de ninguna de las partes".

Hasta el momento, sólo una persona ha sido detenida, quien ingresó para ayudar en las labores de desocupación: "Se le hizo un control de identidad, como corresponde, y arrojó una orden de investigar" desde el Juzgado de Garantía de Talagante, por el delito de amenazas, consignó la general Patricia Vásquez, jefa de la V Zona de Carabineros.

Denuncias contra algunos dirigentes

A pesar de la aparente calma general, se ha reportado una fractura o división entre los propios vecinos de la toma. El quiebre surgió por la actitud de una de las dirigentas del sector, quien había manifestado públicamente su intención de resistirse a abandonar el lugar. Esta postura fue criticada por otros pobladores, quienes admitieron estar conscientes de que ocupaban un terreno que no les pertenece y priorizaron resguardar a niños y adultos mayores.

Además, la alcaldesa Carolina Corti reveló que algunos pobladores "han desenmascarado a personas que les han mentido de manera permanente, les han mostrado papeles que no tienen nada que ver con la realidad, y les han incitado a mantenerse hasta el final, cuando esto (el desalojo) era inminente".

"Tenemos que empezar a evaluar qué hay detrás de todo esto, porque casualmente, vemos a los mismos personajes repitiéndose en distintas tomas", advirtió la jefa comunal.

La autoridad de Quilpué lo declaró en alusión al abogado de los vecinos de esta toma, Rodrigo Valdés, quien también representa a un grupo de la megatoma de San Antonio.

Por otro lado, la Municipalidad de Quilpué ya habilitó un albergue para quienes lo necesiten en el Gimnasio Municipal, ubicado al centro de la comuna, el que preliminarmente funcionará por 72 horas, aunque ese periodo podría extenderse por 24 horas más.

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