El papa Francisco pasó una noche tranquila y sigue descansando, informó este miércoles la oficina de prensa del Vaticano, después de que el último parte informara que su estado sigue siendo "crítico" pero "estable" en el hospital Gemelli de Roma por sus problemas respiratorios.
Según fuentes vaticanas, el pontífice desayunó normalmente, y se trasladó al sillón, y espera "probablemente" para hoy los resultados de una tomografía computerizada (TAC) realizada en la víspera.
Tal examen es el primero que se le practica a Francisco desde el que mostró su neumonía bilateral el 18 de febrero. Por lo pronto, el pronóstico de los médicos sigue siendo reservado.
A la espera de los resultados, Francisco continúa con la terapia de oxígeno, pero con flujos "levemente reducidos" en comparación con los días anteriores.
La "estabilidad" de sus condiciones también aplica para la insuficiencia renal que se le diagnosticó en los últimos días hospitalizado, patología de carácter "leve", "bajo control" y que no suscita preocupación entre sus médicos.
El pontífice mantiene sus labores
Por otro lado, el papa sigue trabajando desde la habitación del hospital: en estos días ha firmado algunos nombramientos y el lunes, decretos de canonización como el de José Gregorio Hernández Cisneros, el primer santo de Venezuela.
También ha modificado algunas leyes para dar más poderes a la primera mujer "gobernadora" del Estado de la Ciudad del Vaticano, Raffaella Petrini.
También indicó la organización de un consistorio para poner fecha a las canonizaciones, aunque no se sabe cuándo tendrá lugar. Lo anterior hizo recordar a la reunión de cardenales en la que Benedicto XVI anunció su renuncia al pontificado.
Mientras se prolongue su hospitalización, que ya cumple 13 días, los cardenales, miembros de la Curia y los fieles que lo deseen continuarán rezando cada noche el rosario en la Plaza de San Pedro del Vaticano.