Un 60% de los locales comerciales de Chile fueron víctimas de robo durante el primer semestre del 2025, según cifras de una encuesta realizada por la Cámara Nacional de Comercio (CNC).
Uno de los hallazgos más preocupantes del sondeo es el aumento de la revictimización. Aquellos negocios que han sufrido delitos, en su mayoría, los experimentan más de una vez, con un promedio alarmante de 33,8 incidentes por víctima.
Esta situación, advierten desde la CNC, pone de manifiesto la persistencia de la delincuencia y la vulnerabilidad del sector comercial.
"Algunas de las preocupaciones para nosotros hoy termina siendo el gasto en medidas de seguridad para pequeñas y grandes empresas", afirmó José Pakomio, presidente de la Cámara Nacional de Comercio.
Los propios locatarios del barrio Lastarria relatan la frecuencia de los delitos: "Diez veces me han intentado robar. A uno lo tomé del cuello, le puse un destornillador y lo eché para afuera, porque no me quise acriminar con él. De hecho, el computador lo tengo anclado, si no, a lo mejor ya me lo habrían llevado", relató un comerciante.
Otros reconocen que, aunque no siempre sufren asaltos directos, la sensación de vulnerabilidad es permanente: "No han entrado a robar, pero sí se siente un poco el tema de la inseguridad. Hay seguridad, pero en verdad es más que nada contra los ambulantes. Igual se siente esa desconfianza".
En calles céntricas de Santiago, como Mosqueto, la violencia es aún más evidente. "En esta calle todos los días hacen asaltos con motochorros. Roban celulares dos o tres veces al día. En la noche han asaltado varias veces a los vecinos, no en el local, pero sí afuera en la calle", contó otro locatario.
Esta carga financiera es significativa, ya que el 72% de los encuestados reporta tener gastos mensuales en seguridad, un monto que Pakomio calificó como un "impuesto permanente" debido a su recurrencia y necesidad.
La implementación de estas medidas es una realidad para los comerciantes. Cada local, en promedio, ha implementado ocho medidas de seguridad, y un 44% de los encuestados incrementó estas acciones durante el primer semestre de 2025.
Estos esfuerzos, sin embargo, representan una inversión considerable que impacta en la rentabilidad de los negocios: "Tenemos dos cortinas, una eléctrica y una manual. Pagamos como una especie de vigilancia. En las noches queda alguien por ahí, pero no es una empresa formal, es algo más básico, como un nochero", explicó otra afectada.
Desconfianza en el sistema de denuncias
Otro punto crítico que emerge de la encuesta es la baja tasa de denuncia efectiva y la falta de respuesta ante los delitos.
"Hoy día, el que tengamos una baja tasa de denuncia también preocupa, porque no podemos poner esfuerzos ni recursos donde de verdad tenemos el problema", advirtió el empresario, que también enfatizó su preocupación con "el alto porcentaje de quienes sí han denunciado y que no hayan recibido respuesta".
"Esto habla, sin duda, de una desconfianza en el sistema, en los en los organismos públicos", lamentó.
Las cifras corroboran esta percepción: el porcentaje de comerciantes que no denuncian alcanza el 58,2%. Más desalentador aún es que, de aquellos que sí realizan denuncias, un 78,4% no obtiene resultados positivos, lo que refuerza la sensación de impunidad y la reticencia a invertir tiempo y recursos en procesos que perciben como ineficaces.