Dirigentes mapuche de La Araucanía se mostraron insatisfechos con las conclusiones de la Comisión por la Paz y el Entendimiento, rechazando que la mesa se haya instalado con militares en territorio indígena y el estado de excepción que ya lleva tres años en la Macrozona Sur.
Algunas organizaciones, también apuntaron a que el Acuerdo no se hace cargo del crimen de genocidio –como lo califican-, llevado por el Estado chileno y colonos desde 1881, en la denominada "pacificación de La Araucanía".
"Las instancias militares han permitido que terroristas estén ocupando nuestro territorio, en el caso de los ladrones de madera y las grandes forestales", planteó el dirigente de Loncoche Erwin Colillanca, y afirmó que la instancia fue una "ocasión donde los partidos se dan el lujo de determinar ellos quién y cómo tendrán derecho a tierras".
En esa línea, sostuvo que "esta comisión carece de un mandato claro, entendiéndose que han excluido las verdaderas causas y naturaleza del conflicto en nuestro Walmapuche, como es el crimen de genocidio. (Por lo que) genera, por supuesto, todo lo contrario al entendimiento o a una posible paz".
Cppy Oficial Resumen-ejecutivo by mathimalakian
Excomisionada Nuyado (PS): "A quienes son nuestros hermanos mapuches los invitamos a informarse"
Las críticas se suman a las del líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, publicadas en la edición chilena de Le Monde Diplomatique en la que acusó que el trabajo es "una nueva farsa" y no representa los objetivos políticos del movimiento mapuche autonomista.
Lo anterior, fue respondido por la excomisionada y diputada Emilia Nuyado (PS) durante la ceremonia de entrega del informe al Presidente Gabriel Boric e indicó que "no era fácil para los mapuches sentarnos a dialogar, cuando sabíamos que muchos están hoy día en las cárceles. A quienes son nuestros hermanos mapuche, los invitamos a informarse, leer, y que tengamos esta oportunidad única".
Por su parte, el también excomisionado Adolfo Millabur, otrora jefe comunal de Tirúa, afirmó que "lo que plantea la gente de la CAM lo dijeron al comienzo, cuando se constituyó esta comisión, ellos dijeron que no la compartían. Entonces lo que dicen ahora es coherente con lo que han planteado siempre y, en mi caso particular, yo respeto su posición".
"Nosotros estamos con el esfuerzo, estamos acá los mapuches de poder, mediante el diálogo, el entendimiento, dar un primer paso hacia la paz", aseveró.
Asociación de Víctimas de Violencia Rural apunta a profundizar en la reparación
Por otro lado, desde la Asociación de Víctimas de Violencia Rural consideraron importante profundizar en el trabajo que se haga cargo de la reparación a quienes han sufrido ataques incendiarios desde los años noventa hasta la fecha.
"Que el Estado tenga los elementos que generen las reparaciones a quienes han sufrido este flagelo, a través de una ley de reparación a víctimas. Esta posición de Avvru fue claramente transmitida a los integrantes de la comisión, cuando fuimos citados a exponer la situación. Sin reparación a las víctimas difícilmente podrá haber reconciliación", dijo Alejo Apraiz, presidente de la organización.
"¿Qué podríamos esperar de esta Comisión?"
Durante la tarde de este martes han trascendido distintas reacciones tras la entrega del informe de la Comisión para la Paz y el Entendimiento al Presidente Gabriel Boric.
El lonko Alberto Curamil, Premio Nobel Verde en 2019, cuestionó algunos de los contenidos del informe: "Otro elemento que le quita valor, por supuesto, es la militarización. Esta Comisión está actuando bajo un estado de excepción en el 'Wallmapu'. Entonces: ¿Qué podríamos esperar de parte de esta Comisión?".
"Por otra parte, también se aprueban leyes represivas como el robo de madera, la ley de usurpación. Esperamos un avance, por último, ante esta Comisión de Paz, (porque) de lo contrario no va a servir para el mundo mapuche ni para la supuesta paz en La Araucanía"
Para los dirigentes indígenas es relevante que la Comisión aborde lo que ellos denominan 'el crimen de genocidio', llevado a cabo por el Estado chileno desde 1881, en el marco de la llamada "Pacificación de La Araucanía".